Un
año más Pálmaces no deja indiferente. Felicidades por la maravillosa
organización y gracias a todos los voluntarios, jueces y públicos por hacer de
este triatlón una prueba única.
Fecha
marcada en rosa en el calendario. Después de Valencia tenía 4 semanas antes de
participar y decidí hacer un microciclo enfocado a mejorar la fuerza. La
primera semana trabajamos la fuerza máxima, la segunda la de resistencia
transferida al ciclismo, la tercera fuerza resistencia transferida a la carrera
a pie y una cuarta de recuperación.
Y
llegó el día, el trabajo estaba hecho y tenía muy buenas sensaciones. Sabía que
las rivales estaban muy fuertes y los circuitos eran exigentes y creo que
aunque todo esto me ponía más nerviosa también me motivaba más!
Sábado
16:30 de la tarde, todos al agua. Preparados, listos, ya!
En
un segundo veo cómo todo se derrumba, todos se alejan y me despido de Pálmaces.
Se me han roto las gafas, salgo del agua miro a los jueces y me animan a buscar
unas, me pongo a gritar cómo una loca y consigo unas. Me tiro al agua, están
muy lejos, pero las ganas me pueden, el objetivo es salir antes del tiempo de
corte.
Lego
a la T1, oigo los ánimos de Edu (algo le ha pasado) pero no consigo ni verle, me abrocho el
casco y empiezo a tener sensación de ahogo, no puedo respirar. Intento
mantener la calma y tranquilizarme. Cojo la bici con dudas, no me siento
bien, y me planteo abandonar. Cambio el
chip, decido disfrutar de la carrera y lo que tenga que ser será.
Paso
las subidas del km 5 y ya voy viendo a algunas chicas, me animo y sigo dando
pedales, las piernas están respondiendo bien y voy fuerte, paso a Lucía y a
Yolanda, dos rivales fuertes. Sigo concentrada y apretando en cada momento
consciente de que esto me pasaría factura luego pero no estoy en posición de
guardar nada.
Recibo
unos ánimos inesperados que me dan ese chute extra de energía que
necesito. Llego a la T2 y me doy cuenta
que sigo muy nerviosa, pero con ganas de seguir adelante. Creo que estoy entre
las 10 primeras.
Salto
a correr, ahora viene el plato fuerte! Dos vueltas de 6 km entre bajadas y
subidas que se hacen eternas (de esas que crees que caminando las subes más
rápido). En fin que si algo queda hay que dejarlo aquí. Paso a algunas chicas
y veo cómo Alba me adelanta y decido quedarme atrás sin perderla de vista (a
ver si le puedo seguir el ritmo). En la
segunda vuelta apretamos un poco más y pillamos a Ester. Eso significa que
debemos ir bastante delante.
Llego
a meta sin aire, sin energía y feliz. Feliz por estar un año más allí, feliz
por haber luchado, feliz por haber sufrido y feliz por haber sentido cada km de
esta carrera cómo una segunda oportunidad. Porque el rendirse no es una
opción.
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| 5a clas femenina |
Muchas
gracias a todos los que me apoyáis día a día, gracias Santi y a VO2 por tantos
entrenamientos compartidos (sobretodo los matutinos), gracias Joaquin por tus
clases magistrales y por enseñarme a tener cabeza, gracias Albert por tantos
años a mi lado enseñándome que la prevención es la mejor arma contra las
lesiones, gracias Carles por ser mi
mayor apoyo técnico y moral, gracias Marc por una piel más sana y gracias Jesús por
alimentar mis sueños.
Ahora
toca unos días de olvidarse de planificaciones y pronto de disfrutar de Mallorca!
